Entre los factores más comunes que causan estrés en las plantas están el déficit hídrico, heladas, la salinidad y el déficit de oxígeno en el suelo.
Durante las horas más cálidas del día la concentración de oxígeno disminuye considerablemente, por ejemplo, por lo que un aporte adicional de riego durante este período es necesario para mantener la fotosíntesis. Sin embargo, la falta de oxígeno en el suelo también puede estar asociada al exceso de agua, uso excesivo de maquinaria agrícola, falta de materia orgánica y poblaciones escasas de microorganismos. Al mismo tiempo, este déficit de oxígeno en el suelo puede llegar a inducir múltiples disfunciones en las plantas.
Debido a la falta de oxígeno, la capacidad de la planta para realizar fotosíntesis se ve disminuida, por lo tanto, su metabolismo se ralentiza, afectando directamente el crecimiento y rendimiento de la cosecha. Además, se inhibe el transporte de carbohidratos, se disminuye la absorción de macronutrientes debido a la muerte de raíces y pérdida de micorrizas, adicionalmente se altera el balance hormonal en las plantas debido al incremento de etileno en la atmósfera del suelo.
Para contrarrestar la deficiencia de oxígeno existe un método llamado oxifertirrigación. La oxifertirrigación es una técnica que potencializa el riego y que tiene como finalidad mejorar los cultivos agrícolas mediante el suministro de algún elemento químico o aumentando la concentración de oxígeno en el agua de riego directamente en la zona radicular. Esta metodología promueve una aireación optimizada de la zona radicular de los cultivos vegetales, permitiendo una mejor asimilación de oxígeno para la respiración de la planta, facilitando así la absorción de nutrientes disponibles en suelos o aquellos aportados por fertilizantes.
Algunas técnicas para aumentar la concentración y solubilidad del oxígeno en el agua de riego requieren aireación, agitación, añadir oxígeno gaseoso o promover reacciones que sinteticen oxígeno. De estas técnicas se puede destacar las siguientes:
- Oxigenación mecánica: se utiliza una bomba de aire y otros recursos para oxigenar directamente el agua en el tanque de almacenamiento. Al utilizar esta técnica de oxigenación se debe mantener la bomba continuamente en funcionamiento durante el proceso de riego.
- Oxigenación utilizando el efecto venturi: en el sistema de riego se instala un dispositivo venturi, a través del cual se mezcla el agua y el aire a alta presión, promoviendo la oxigenación del agua. Este dispositivo se suele utilizar en los sistemas de riego superficial por goteo.
- Oxigenación química: la oxigenación se realiza añadiendo elementos químicos como el peróxido de hidrógeno. Estos elementos reaccionan con el agua y liberan moléculas de oxígeno en la disolución. Esta técnica tiene la ventaja de reaccionar rápidamente y de liberar una gran cantidad de oxígeno, lo que aumenta rápidamente la concentración de oxígeno disuelto en el agua, evitando la saturación.
Huwa-San® TR-50 SL es un peróxido de hidrógeno estabilizado con plata coloidal. Este producto es un agente oxidante con función fungicida, bactericida y viricida. Como resultado del control se obtiene agua y oxígeno, aumentando así las concentraciones de oxígeno disuelto en el suelo, lo que ayuda a mejorar el sistema radicular de las plantas, aumenta la permeabilidad y disminuye la compactación del suelo.
Las raíces, cuando están oxigenadas, son capaces de absorber selectivamente los nutrientes esenciales según las fases de desarrollo.
Adicionalmente, la falta de oxígeno reduce la permeabilidad de las raíces al agua, impidiendo la correcta absorción de minerales presentes en el suelo. Finalmente, la oxifertirrigación reduce los problemas de asfixia radicular, disminuyendo el nivel de mortalidad del cultivo, y su elevado potencial antimicrobiano ayuda a controlar diversos patógenos presentes en el suelo, aportando mayor resiliencia de las producciones agrícolas.