¿Quieres restaurar tus suelos y aumentar la productividad de tus cultivos?
Las prácticas agrícolas intensivas y la falta de rotación de cultivos han deteriorado la fertilidad y la calidad de los suelos agrícolas, afectando su biodiversidad y resultando en cultivos cada vez menos productivos. Para suplir la necesidad de nutrientes de los cultivos y garantizar una buena producción, programas de fertilización son tradicionalmente implementados. Sin embargo, los suelos deteriorados y altamente fertilizados no pueden llegar a dar el soporte que los cultivos necesitan, ya que, a pesar de contener nutrientes, estos no se encuentran biodisponibles para las plantas. Adicionalmente, en los últimos años han existido varias causas relacionadas al alza de los precios de los fertilizantes convencionalmente utilizados, resaltando la importancia de programas de fertilización más eficientes y enfocados a las necesidades específicas de cada suelo y cada cultivo.
Una alternativa innovadora, ecológica, de origen biológico y altamente efectiva, tanto para la bioestimulación de distintos cultivos como para la restauración de suelos agrícolas, es el uso de microorganismos benéficos. Hongos como Trichoderma sp. han demostrado fortalecer el sistema radicular de los cultivos y mejorar su nivel de tolerancia a distintos factores de estrés, mientras que los efectos positivos mediados por bacterias promotoras del crecimiento como lo son B. safensis y B. siamensis, han sido descritos para una amplia gama de cultivos en diversas condiciones ambientales. El programa ROOT de MICSA consta principalmente de la aplicación de RIKODERMA® 8 WP, un producto a base de Trichoderma sp. RGM 2638 –un hongo con propiedades fungicidas y bioestimulantes– y SMARTHOR®, un producto a base de la mezcla de Bacillus safensis RGM 2450 y Bacillus siamensis RGM 2529 –dos bacterias nativas con efectos bioestimulantes. Nuestros procesos biotecnológicos, contrario a los procesos artesanales para la producción de microorganismos, cuentan con varios puntos de control –microbiológicos y moleculares– que garantizan que los microorganismos que constituyen el ingrediente activo de estos productos son los únicos presentes en los mismos y por tanto, el producto va a actuar de la forma deseada sobre los cultivos.
El programa ROOT fortalece y protege el sistema radicular de los cultivos, facilita la solubilización de fósforo y potasio y disminuye el uso de fertilizantes hasta en un 30%. La implementación de este programa ha llegado a mejorar el rendimiento de los cultivos hasta en un 15% al presentar efectos que incluyen el crecimiento del sistema radicular, al permitir un mejor aprovechamiento de los nutrientes en el suelo y al presentar un aumento en el peso y tamaño de los frutos cosechados. Además, el uso de estos microorganismos no representa un daño al medio ambiente ni a la salud humana.
Este programa está dirigido a productores de la gran variedad de cultivos producidos en Guatemala y la región que buscan mejorar su producción y la fertilidad de sus suelos, promoviendo el uso sostenible y la restauración de los suelos agrícolas. Adicionalmente, al tratarse de una estrategia de control biológico, los cultivos podrán tener acceso a mercados no convencionales que le dan al producto más valor, como el mercado de la agricultura orgánica o ecológica en Estados Unidos o Europa.
La implementación del programa ROOT toma en cuenta el estado del suelo y los cultivos, y se adapta no solo a cada escenario sino también a los programas nutricionales existentes. Debido a eso, MICSA cuenta con asesoría y acompañamiento técnico personalizados por parte de nuestro equipo interdisciplinario de profesionales. Este soporte es crucial para la transición hacia una agricultura sostenible y asegura que se implementen las mejores estrategias para fortalecer la salud y productividad de cada cultivo, todo ello adaptándose al presupuesto disponible.